10-06-2010, 12:49 AM
Había una gitana gorda de mandil que vendía fruta en los mercadillos y que conoció a un señor de mucho dinero que se enamoro de ella y la quito de la calle y la trataba como a una reina. Viajes, coches, casas, lujo y más lujo…
Un día, fueron a Marbella a pasar unos días, y asistieron a una fiesta de gente mucho postín y adineradas. Estaba la gitana con dos señoras mas charlando de los lujos y placeres de la vida cuando dice una de ella:
-El otro día, fui con mi marido a una exposición de coches y al pasar por delante de la firma Mercedes vi el último modelo descapotable ¡que me encanto! Y al día siguiente mi marido me lo ha regalado.
Dice la gitana:
-Maravilloso, maravilloso.
Dice la otra señora:
-Pués yo fui con mi marido a una exposición de joyas y al pasar por delante de un expositor, vi un collar de oro blanco con rubís y esmeraldas, ¡que divino! Al día siguiente, mi marido me lo ha regalado.
Dice la gitana:
-Maravilloso, maravilloso.
Y le preguntan a la gitana, Oye , o sea, tu marido no te regala nada? y dice la gitana:
-Si, mi marido me ha regalado un profesor de dicción.
-¿Cómo? -dicen las otras.
-Si, yo antes decía “asandia” y ahora digo “sandia”, antes decía “malacotones” y ahora digo “melocotones”
y antes decía “me sua er coño” y ahora digo “maravilloso, maravilloso“.
Un día, fueron a Marbella a pasar unos días, y asistieron a una fiesta de gente mucho postín y adineradas. Estaba la gitana con dos señoras mas charlando de los lujos y placeres de la vida cuando dice una de ella:
-El otro día, fui con mi marido a una exposición de coches y al pasar por delante de la firma Mercedes vi el último modelo descapotable ¡que me encanto! Y al día siguiente mi marido me lo ha regalado.
Dice la gitana:
-Maravilloso, maravilloso.
Dice la otra señora:
-Pués yo fui con mi marido a una exposición de joyas y al pasar por delante de un expositor, vi un collar de oro blanco con rubís y esmeraldas, ¡que divino! Al día siguiente, mi marido me lo ha regalado.
Dice la gitana:
-Maravilloso, maravilloso.
Y le preguntan a la gitana, Oye , o sea, tu marido no te regala nada? y dice la gitana:
-Si, mi marido me ha regalado un profesor de dicción.
-¿Cómo? -dicen las otras.
-Si, yo antes decía “asandia” y ahora digo “sandia”, antes decía “malacotones” y ahora digo “melocotones”
y antes decía “me sua er coño” y ahora digo “maravilloso, maravilloso“.